La vivienda ARG se sitúa en una parcela con una fuerte pendiente delimitada en tres de sus lados por una zona verde protegida con un paisaje típico de bosque mediterráneo donde predominan los pinos y encinas.
El proyecto se concibe respetando el entorno en el que se ubica. La orografía y las vistas desde la parcela son fundamentales para la generación e implantación de la vivienda.
Los dos volúmenes de hormigón superpuestos que conforman la vivienda descansan sobre un basamento de piedra que se adapta a la fuerte pendiente de la ladera. El acceso se realiza por la parte más baja de la parcela a través de un pórtico integrado en el terreno.
La vivienda queda en la parte más alta aislada y envuelta por la vegetación autóctona generando su propio universo.
Tanto en el exterior como en el interior se utilizan colores naturales y se emplean materiales como el hormigón, la piedra y la madera que refuerzan la integración paisajística y la armonía con el entorno.